Reflexiones
Artículo de Germán Ortiz
PRE ADOLESCENCIA: Alianza padres y lideres.

En el ministerio con preadolescentes, muchas veces ponemos todo el foco en las reuniones, los juegos, la enseñanza bíblica y el vínculo con los chicos. Pero hay una verdad tan poderosa como olvidada: no podemos discipular sin los padres. Ellos son los primeros pastores, los guías más constantes, los formadores del corazón y carácter de sus hijos. ¿Qué lugar les damos en nuestro ministerio?
ALIANZA LÍDERES Y PADRES –
DISCIPULADO
La Biblia es clara: la formación espiritual empieza en casa. En Deuteronomio 6, Dios le habla al pueblo y les dice que enseñen sus mandamientos a sus hijos “en todo momento”, no solo en el templo. Por eso, los líderes no reemplazamos a los padres; los acompañamos y fortalecemos.
EN CASA
Sin embargo, en muchos casos, los padres llegan agobiados, inseguros o desconectados. Necesitan nuestro apoyo, no juicio. Necesitan un equipo. Socios y aliados, no expertos que sólo los corrijan. Por eso, la humildad, la empatía y la colaboración deben marcar nuestra relación con ellos.
“No existen padres perfectos, ni líderes perfectos, pero cuando nos unimos en propósito Cuando dejamos de vernos como compartimentos aislados y empezamos a trabajar en equipo, el discipulado se vuelve profundo, cotidiano y transformador.”
Cuando dejamos de vernos como compartimentos aislados y empezamos a trabajar en equipo, el discipulado se vuelve profundo, cotidiano y transformador.

CLAVES PARA CONSTRUIR UNA BUENA RELACIÓN
- Comunicación constante y clara: Informar con tiempo, explicar los objetivos, compartir lo que se está trabajando con los chicos. No solo avisos, también visión.
- Celebración y afirmación: Resaltar lo bueno que los padres hacen. Agradecer, reconocer, honrar.
- Involucramiento real: Invitar a que participen en actividades, charlas, encuentros. Darles lugar.
- Escucha activa y disponibilidad: Abrir espacios para que ellos también puedan hablar, hacer preguntas o compartir preocupaciones.
- Capacitación pastoral: Ofrecer herramientas, recursos y encuentros que los ayuden a criar con sabiduría y fe.
ESPACIOS SEGUROS
La familia no es un obstáculo para el ministerio, es parte esencial de él El líder sabio no reemplaza a los padres, los fortalece. El hogar es el primer seminario teológico del niño.

